Crea una pintura de paisaje costero minimalista y abstracta en estilo gouache o acrílico, utilizando colores suaves, planos y mates. La composición debe incluir formas geométricas simples y formas orgánicas que representen la naturaleza, como árboles, casas, montañas y el mar. Utiliza tonos tierra. La textura general debe ser suave y blanda, sin detalles agudos, centrándose en composiciones calmadas, serenas y equilibradas. El estilo debe evocar una estética modernista y minimalista, similar a las obras de artistas como Henri Matisse o Manuel Monge, con un enfoque en la simplicidad y la tranquilidad.